Absorbe más nutrientes con enzimas digestivas.

La frase «eres lo que comes» es una falacia. La verdad es que eres lo que digieres, y las enzimas digestivas son clave tanto para una mejor digestión como para la absorción de nutrientes.

Por sorprendente que parezca, hasta hace relativamente poco, poco se sabía sobre cómo funciona realmente tu sistema digestivo. Hoy en día, hay una creciente incidencia de enfermedades que, cuando se remontan a la fuente, parecen estar relacionadas con la malabsorción de nutrientes debido a la falta de enzimas digestivas.

El proverbio chino, «El que toma la medicina y descuida la dieta, desperdicia la habilidad del médico», puede no ser tan cierto como nos gusta creer. A menudo, una buena nutrición por sí sola no es el único problema involucrado en mantener una buena salud y evitar enfermedades.

¿Qué son las enzimas digestivas?

Todas las enzimas son catalizadores que permiten que las moléculas se cambien de una forma a otra. Estas enzimas nos ayudan a digerir los alimentos al descomponer moléculas grandes en más pequeñas que nuestros intestinos son capaces de absorber. Lo que respalda la salud intestinal y se asegura de que los nutrientes lleguen al cuerpo.

Las enzimas digestivas no solo son beneficiosas, ¡son esenciales! Descomponen los alimentos en aminoácidos, ácidos grasos, colesterol (sí, es importante tener colesterol), azúcares simples y ácidos nucleicos, que ayudan a hacer ADN.

¿Quién debe tomar enzimas digestivas?

En una cara de la moneda, «si no está roto, no lo arregles, ¿verdad?» Esta perspectiva sostiene que, si no tienes problemas de digestión, tomar enzimas simplemente no es necesario.

Por otro lado, con el agotamiento del suministro de nutrientes en nuestras dietas y la afluencia de enfermedades crónicas, un poco de ayuda adicional no podría hacer daño.

De cualquier manera que se mire, un número creciente de personas toman enzimas digestivas hoy en día, y ciertas condiciones de salud como las siguientes son buenas razones para complementar.

#1. Enfermedades digestivas

Si tienes cualquier tipo de enfermedad digestiva como reflujo ácido, gases, distensión abdominal, intestino permeable, síndrome del intestino irritable (SII), enfermedad de Crohn, diverticulitis, malabsorción, diarrea o estreñimiento, entonces las enzimas digestivas pueden ayudar.

Pueden ayudar a aliviar el estrés de los órganos digestivos y disminuir los síntomas como el dolor abdominal y la distensión que están asociados con la enfermedad gastrointestinal.

#2. Insuficiencia enzimática relacionada con la edad

A medida que envejecemos, la acidez del ácido de nuestro estómago se vuelve más alcalina y esto puede evitar que se liberen suficientes secreciones pancreáticas.

Dejando a un lado las enfermedades concurrentes, a medida que envejecemos existe una sospecha cada vez mayor de que los problemas digestivos pueden ser el resultado de un bajo nivel de ácido estomacal o una insuficiencia de enzimas digestivas, que se cree que son causas comunes de reflujo ácido.

#3. Hipoclorhidria

La hipoclorhidria (que tiene muy poco ácido estomacal) dificulta que los minerales, vitaminas y nutrientes se «escindan» o se liberen de los alimentos mientras están en el tracto gastrointestinal, y si esta acción falla, el resultado suele ser una insuficiencia nutricional.

#4. Enfermedad hepática

Se debe sospechar que cualquier persona con enfermedad hepática tenga una insuficiencia enzimática concurrente. Una de las afecciones más comunes se conoce como deficiencia de alfa-1 antitripsina, un trastorno genético que afecta aproximadamente a una de cada 1.500 personas en todo el mundo.

Los síntomas que se pueden experimentar incluyen pérdida de peso involuntaria, infecciones respiratorias recurrentes, fatiga y latidos cardíacos rápidos.

Entre las enfermedades (que en el primer diagnóstico pueden parecer no estar relacionadas con una baja producción de enzimas digestivas) se incluyen:

• Enfermedad de Crohn 
• Deficiencia de hierro o de vitamina B12
• La deficiencia de vitamina D

Otros indicadores sintomáticos de insuficiencia enzimática son:

• Cambios en las heces: si las heces son pálidas y flotan en la taza del inodoro o si están grasosas.
• Problemas gastrointestinales: distensión y diarrea, especialmente alrededor de una hora después de comer. La flatulencia y la indigestión también son indicativas.

Beneficios de las enzimas digestivas

¿Cuáles son los beneficios de las enzimas digestivas?

La respuesta es simple: ¡Sin ellas, no podríamos procesar los alimentos! Dicho esto, hay tres razones principales por las que la mayoría de las personas deben tomar enzimas digestivas:

• Ayude a tratar el intestino permeable y otras afecciones como la enfermedad celíaca al eliminar el estrés del tracto gastrointestinal.
• Apoya un equilibrio saludable de bacterias y microbios en el intestino.
• Ayuda al cuerpo a absorber proteínas y azúcares difíciles de digerir como el gluten, la caseína y la lactosa.
• Mejora enormemente los síntomasdel reflujo ácido y el síndrome del intestino irritable.
• Potencia la absorción de la nutrición y previene deficiencias.
• Contrarresta los inhibidores de enzimas de forma natural en alimentos como maní, germen de trigo, claras de huevo, nueces, semillas, frijoles y papas.

Quizás te estés preguntando, si las enzimas digestivas ayudan a perder peso o quemar grasa.

Las enzimas digestivas generalmente no están relacionadas con la pérdida de peso y no están diseñadas para este propósito, aunque pueden ayudar a controlar tus antojos y permitirte sentirte satisfecho con menos.

¿Cuáles son los mejores suplementos de enzimas digestivas?

Los productos de enzimas digestivas se derivan de tres fuentes:

• De origen frutado, generalmente a base de piña o papaya.
• De origen animal, incluida la pancreatina procedente de bueyes o cerdos.
• De origen vegetal, a partir de probióticos, levaduras y hongos.

Enzimas digestivas de espectro completo

Asegúrate de buscar una mezcla de enzimas de espectro completo para la mejora digestiva general. Estos son algunos consejos:

• Si tienes problemas de vesícula biliar y estás buscando un tratamiento natural, compra uno con más sales de lipasa y bilis.
• Cuando veas betaína HCL en la lista como ingrediente del producto, asegúrate de que la pepsina también esté incluida.
• Otros contienen lactasa, que hasta hace poco solo estaba disponible como un producto individual. Esta enzima está diseñada para ayudar a aquellos con problemas específicos relacionados con la absorción del azúcar de los productos lácteos.
• Elije una mezcla con hierbas, como la menta y el jengibre, que apoyan la digestión.
• Además, debido a que algunas personas necesitan más enzimas pancreáticas que otras, debes tener en cuenta la cantidad de acuerdo a tus necesidades. La mayoría de los productos contienen algún nivel de pancreatina, que es una combinación de las tres enzimas pancreáticas.

Al final del día, no hay duda de que muchas personas se benefician de tomar suplementos enzimáticos.

¿Cuándo deberías tomar enzimas digestivas?

Para obtener resultados óptimos, tómalas unos 10 minutos antes de cada comida o con tu primer bocado. Los suplementos de proteasa se pueden tomar entre comidas.

Comienza tomando enzimas con dos comidas al día y ajusta tu dosis según sea necesario a medida que avanzan los días.

¿Puedes tomar probióticos y enzimas digestivas al mismo tiempo?

Si. Toma enzimas antes de una comida y probióticos después o entre ellas.

También es beneficioso obtener probióticos de alimentos fermentados como yogur, kéfir, kimchi o chucrut. Los probióticos pueden ayudar a restablecer el equilibrio del microbioma intestinal y ayudar aún más en la digestión, al mismo tiempo que frenan síntomas como gases e hinchazón.