Fragancias, síntomas y tratamiento de la sensibilidad

Lo creas o no, hasta un tercio de todos los adultos padecen algún tipo de sensibilidad a las fragancias. Lo cual, puede desencadenar síntomas como dificultad para respirar, dolores de cabeza e irritación de la piel. De hecho, la Academia Estadounidense de Dermatología considera que estas son la principal causa de dermatitis de contacto cosmética.

La mejor manera de controlar esta sensibilidad es eliminar de tu vida tantos productos perfumados como sea posible. Sobre todo, los elaborados con una multitud de productos químicos sintéticos, como muchos lo son.

La verdad es que puede resultar difícil evitarlos debido a su popularidad y a que las etiquetas no siempre son transparentes. Incluso algunos etiquetados como “sin perfume” tienen ciertos ingredientes, como aceites o hierbas. Los cuales, pueden resultar irritantes para algunas personas.

¿Qué es la sensibilidad a las fragancias?

Una sensibilidad a las fragancias es una reacción negativa a los productos de perfusión. Que pueden incluir, productos de belleza, hogar y cuidado personal.

Las personas con una gran sensibilidad con mayor frecuencia reaccionan a productos que incluyen:

• Perfumes, y colonias
• Ambientadores
• Detergentes para ropa
• Soluciones de limpieza
• Lociones corporales y otros artículos de tocador
• Productos para el cuidado del cabello, como champú, laca para el cabello, etc.
• Aceites esenciales y diversos productos elaborados con estos aceites. Como velas, artículos de limpieza y sueros faciales.
• Pesticidas

Síntomas

Los síntomas que pueden ser causados por la sensibilidad a las fragancias pueden incluir:

• Problemas respiratorios, incluyendo tos, dificultad para respirar y empeoramiento de los síntomas del asma
• Congestión
• Ojos llorosos
• Migrañas
• Erupciones en la piel, como urticaria, y dermatitis
• Malestar estomacal
• Efectos neurológicos en algunos casos graves

Tratamientos

¿Cómo se tratan las alergias a las fragancias? Te dejo las recomendaciones según los principales expertos:

#1. Evita los olores sintéticos  

Muchas fragancias son capaces de emitir contaminantes atmosféricos peligrosos. Para algunas personas, los aromas sintéticos pueden provocar reacciones adversas debido a los químicos que contienen. Los cuales, pueden resultar irritantes para los senos nasales.

Para reducir su exposición, elimina lo siguiente de tu rutina de belleza, en casa, en el automóvil y en la oficina:

• Ambientadores
• Velas con fragancias sintéticas.
• Productos de limpieza con fragancias fuertes.
• Artículos de tocador/productos de cuidado personal con olores fuertes.

La EPA, ayuda a identificar productos de limpieza que son efectivos y más seguros para la salud humana y el medio ambiente. Este es un buen recurso para investigar los peligros potenciales de algunos productos perfumados.

#2. Usa limpiadores naturales en tu hogar

Si el uso de productos de limpieza perfumados en su hogar tiende a desencadenar sus síntomas, pruebe soluciones simples. Como, vinagre y bicarbonato de sodio para limpiar y limpiar tu cocina y baño. Las fragancias en realidad no tienen ninguna funcionalidad ni efectos de limpieza. Por lo que, los productos de limpieza naturales sin perfume funcionan igual de bien para mantener tu hogar limpio y libre de gérmenes.

Si no reaccionas mal, también puedes intentar poner varias gotas de aceite de eucalipto en un difusor para limpiar el aire de alérgenos. También se puede utilizar en detergentes caseros para ropa como agente antimicrobiano.

#3. Actualiza tus productos de belleza

Los productos con fragancias para la piel, el cabello y la belleza deben cambiarse por opciones sin olor. Puede resultar difícil encontrar productos que no tengan perfume, lo que significa que fabricar los tuyos puede ser tu mejor opción.

Puedes utilizar ingredientes fácilmente disponibles, como aceite de coco, aceite de argán, vinagre de sidra de manzana y aloe vera. Con los que podrás hacer limpiadores, sueros, tónicos, acondicionadores, etc. Si puedes tolerar los aceites esenciales, no dudes en agregar un poco de aceite de lavanda, manzanilla o incienso para obtener aún más beneficios.

#4. Habla sobre tu sensibilidad en el trabajo

Algunas encuestas han encontrado que aproximadamente el doble de personas prefiere ambientes interiores sin fragancias. Por lo que, si pides esto en el trabajo, no serás la minoría.

Si está interfiriendo con tu capacidad de trabajo habla con tus compañeros o con recursos humanos. Sobre la necesidad de reducir los olores de segunda mano, como velas, ambientadores, aerosoles e incluso perfumes de otros.

Otros consejos

Aquí hay otros consejos y remedios caseros para manejar tu reacción a los olores en interiores:

• Mantén las ventanas abiertas para mejorar la ventilación cuando estés en el interior.
• Solo compra en tiendas que no usen velas y perfumes, y ten cuidado al probarte la ropa que ha sido rociada con fragancias.
• Si no puedes evitar los olores en ciertos lugares, considera usar una máscara facial. De esta forma, ayudas a reducir la cantidad que respiras.